
Verano, complejos y política
El verano: sinónimo en el imaginario colectivo de helados, siestas eternas y pies llenos de arena, se convierte en ocasiones en algo muy distinto. Parece que viene con un examen obligatorio de autoestima en bañador. Y claro, suspenderlo te convierte automáticamente en “superficial”. Porque, ¿qué es más frívolo que preocuparse




